Mujer: ¿Lipo? ¿Lipec? mmm...

Salmo 138, 16...

"Tu viste mis huesos crecer mientras mi cuerpo se formaba en el vientre de mi madre. Tu viste formarse cada parte de mi cuerpo; todo ya estaba escrito en tu libro; fueron formadas a su debido tiempo, sin faltar una sola de ellas".

La sociedad inmersa en las exigencias acondicionadas por los medios de comunicación y su estímulo para hacer de cada individuo un consumidor potencial de sus productos, genera necesidades y esquematiza prototipos que terminan involucrando la forma de pensar, actúar y ser de un individuo con el objetivo de ser parte de un grupo social.. pero ¿que clase de grupo es el que indirectamente exige esas condiciones? ¿quienes te rodean?

Aparecen modelos de consumo y son muchos los que establecen prioridades alrededor. Y antes que construir cimientos de vida y proyectos a futuro sobre una roca fuerte, lo hacen sobre arena, que cualquier fuerte viento puede derrumbar.

Un ejemplo muy cotidiano es el de las operaciones que perfeccionan el cuerpo y lo que muchos hacen para acceder a ellas. De manera muy respetuosa opino que no esta mal, siempre y cuando existan motivos de peso como burlas extremas, o discriminación que hacen de la persona un problema social, o que la pone en riesgo de su salud. Y tampoco que el resultado de la operación no se convierta en lo más indispensablemente valioso ,para la persona que se someta a ún riesgo como esos.


Las operaciones estéticas son algo muy personal que No debemos cuestionar como cristianos pues no somos quién para señalar a una mujer porque por bisturí ahora es más bella fisicamente. ¿Sus motivos? solo ellas lo sabrán y como dicen los abuelos "Nadie sabe lo de nadie"

¿Que lleva a esa persona a tomar una decisión tan seria a costa de su propia vida?.

Para quien tome esa desición desde una perspectiva cristiana el asunto está en para que quiere cambiar su figura y que tantas bendiciones o consecuencias le traerán. Pues antes de verte muy bella por fuera debes estar muy bella por dentro y así alacanzaras nobles ideales.

Si una mujer cristiana desea operarse los senos, ponerse cola y hacerse una transformación física es indispensable descargar en Dios todo lo que la empuja a esa situación extrema de vanidad, clamando sabiduría y llevando sujeto y cautivo el pensamiento a él por sobre todas las cosas, para que quite toda obsesión de querer ser una barbie, o argumentos de amigos usados por el enemigo que estimulan a hacer algo que en el fondo no se quiere.

Es importante hacer un balance muy sensato. El mundo y su administrador es cada vez más influenciado por valores simplistas, eseoso de hacer potenciales consumidores a sus habitantes. Es de analizar de una manera cosciente prioridades que pueden ser mayores que exponer la vida. ¿Cuales? a largo o mediano plazo, una universidad, una casa, garantizar la seguridad social o invertir las finanzas para multiplicarlas entre muchas cosas más.


Dios nos mando así y el cuidado de nuestro cuerpo es fundamental para que funcione bien, nos dio herramientas físicas para mantenernos en forma y, control de nuestros instintos para no excedernos en sus satisfacciones. Pero cambiar nuestra naturaleza es algo delicado ante Dios por ser Dios y creador y ante nosotros mismos por los riegos de ir contra natura.

Si piensas someterte al riesgo piensa antes que existen muchos métodos de estética. Hacer mucho ejercicio, comer sanamente, dormir bien, y ayudarse con truquitos de belleza natural y cremas que abundan sin que eso represente un riesgo para tu vida...
Recuerda que, cómo tu te ves así mismo te ven los demás. Eso se irradia, se contagia y se transmite a los otros.

A eso se le suele llamar AUTOESTIMA, por eso el viejo dicho "La suerte de la fea... la bonita la desea"...

¿Porque esa fea tiene un novio tan bello?
- Por eso, por su alta AUTOESTIMA.

Mil bendiciones


Autor: Paula Andrea Vega
www.levantatusmanos.blogspot.com