Reflexiones:Dios nos pone a prueba y moldea con sus manos nuestro carácter.
A ratos no sentimos agraviados por situaciones que hieren nuestra alma, nos hacen sentir tristes o agobiados, entonces surge la ira o la impotencia y esos sentires del ser humano se hacen presentes con todo y lagrima o histeria, o aquel nudo en la garganta. En fin, s in Dios era un caos y con Dios pues es un caos más chiquito si dejamos que sea él quien actué y dispongamos el corazón y el hacer a su voz. La palabra dice en Jeremías 18:-6 ¿No podré yo hacer de vosotros como este alfarero, oh casa de Israel? . He aquí que como el barro en la mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel. El proceso de la alfarería según se hacía en Israel tiene mucho que enseñarnos: Se pisa el barro. Este tal y como viene tiene impurezas, por eso es necesario añadirle agua, luego se pisa. Durante este proceso se van separando piedras y cosas que luego dañarían la obra final, a la par que le da al barro la consistencia necesaria para poderse trabajar con él. Bueno asimismo, Dios