Reflexión: Mejor que digan aquí corrió que aquí murió"
1 de corintios 10; 12-13. “Así pues, el que crea estar en pie, mire no caiga. No habéis sufrido tentación superior a la medida humana. Y fiel es Dios que no permitirá seáis tentados sobre vuestras fuerzas. Antes bien, con la tentación os dará modo de poderla resistir con éxito”. Todos los seres humanos sienten el pálpito de Dios. Unos le llaman conciencia y otros presentimientos. Pero no es más que el espíritu de Dios hablando, o gritando para que no hagas algo de lo que a la fija de va a arrepentir. Si tú vida pasada toca a tu puerta, no la abras, recuerda que las cosas viejas pasaron, y todas son hechas nuevas. Lectores, hay tentaciones muy llamativas, palabras dulces y seductoras, retos que juegan con tu nombre, ¡Tan cobarde, tan bobo, fracasado, no eres capaz! Sin embargo su final es el fracaso y las consecuencias de estar apartado de Dios. Así que no hables con lo que sabes que te puede devolver, porque es más fácil que tú vuelvas a ese camino, a que ellos acepten andar el tuyo.