Reflexión: Te amo mamá...

Estamos calentando motores con esos detalles para el ser más querido de un hijo, esposo y demás cercanos que aman a esa mujer virtuosa que eres tú y a, quien te dió la vida... ¿quien? la mamá... otros dirían la mamasita... la mamita, mi ma' linda, un simple máaa...

Aprovecho para recordar algunos versículos y mandatos de la biblia que nos dice "Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra." Efesios 6:1-3:

!Ojo! que no dice si tu padre y madre son buenos o malos, o regularcitos. No, es a padre y madre sin queja... y todo te saldrá bien.

También recuerda que aunque hay muchos que no tienen alguno de ellos, o a ninguno, hay consuelo al saber que "el Señor es padre de huérfanos y defensor de viudas en su santa morada", y "Dios hace habitar en familia a los desamparados" (Salmo 68:5-6). De tal manera nos ama que nos respalda aún más.

son muchos los casos en esta tierra de huérfanos levantados de la más absoluta desesperanza para ser llevados en victoria por una mujer que aún sin tener vínculos genéticos con aquel ser, deposita todo su amor, su servicio, su sexto sentido que la hace especial, la hace mujer, la hace digna de titularla "madre". Y es esa la que pone Dios al lado de aquellos que ama, que tienen temor de sus mandatos y que en muchos casos por lo menos intentan ser consecuentes con valores y principios enseñados o aprendidos de su madre ausente.

Dios pone a quien menos te imaginas para demostrar su gloria y su poder a través de elegidos, no importa como se presenten, son instrumentos de amor, de ésmero, de ejemplo, de alegría, de responsabilidad y lo más importante de afecto. Eso que vale más que mil cosas materiales.

Dios jamás abandona a sus criaturas, jamás desampara a sus amados, es un guardaespalda invisible, un padre misericordioso, un maestro muchas veces ignorado por nostros, un verdadero ser lleno de un amor imposible de entender pero vivo, tan vivo como tu o como yo.

Y, aunque muchos no tenemos esa madre genética a quien abrazar, porque Dios así lo decidió, yo te puedo asegurar que hay alguien esperando una llamada, una palabra de amor, un detalle con un gracias por simplemenete ser como una madre para mi...

Nilsa Violeth Giraldo TQM
Gracias le doy a Dios por haberte conocido.
Autor: Paula Andrea Vega
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